Experta en turismo intercultural y comunicación, profesora de español aplicado al turismo. Soy española, nacida en Santa Cruz de Tenerife, en las Islas Canarias.
Viajar, conocer personas de diferentes países y descubrir nuevas culturas siempre ha sido desde pequeña mi gran pasión. Este amor por descubrir el mundo me impulsó a estudiar Turismo Internacional, y llevo aproximadamente 30 años dedicándome con entusiasmo y compromiso a este fascinante sector.
Residente en Cerdeña, la isla que me acogió, me adoptó, y me dio un hijo sardo, donde la familia y mi carrera marcaron mi destino. Sin embargo, una parte de mi corazón siempre ha permanecido en el oeste, en las islas del mar atlántico. Ahora, combinando pasión y profesión, he emprendido el proyecto de mi vida.
Islas del Mar, las islas de cualquier mar, las islas de europa.
Este proyecto es promovido por la asociación EURINSULA, la cual fundé y actualmente presido.
Me siento una isleña europea: el Atlántico y el Mediterráneo corren por mis venas.
Para dar sentido a esta separación de identidad insular, dividida entre diferentes islas y mares, Canarias y Cerdeña, el Atlántico y el Mediterráneo, diseñé mi proyecto, que resume mi vida personal y profesional. Y reparando esta grieta, encontré una casa grande, la identidad de un isleño europeo.
Esto le ha dado un nuevo sentido a mi vida:
Para unir mi corazón, para unir lo que el mar separa y poder transformar este obstáculo en una inmensa y maravillosa oportunidad de intercambio cultural para mí y para todo aquel que quiera compartir conmigo esta apasionante aventura.
Las islas son mi hogar, mi escuela de vida...
Proyecto Islas del Mar pretende unir las diversidades insulares, la cultura, la historia, la arqueología y las tradiciones de las islas, para transformarlas en modelos de descubrimiento, aprendizaje, discusión, de los que surja un verdadero intercambio intercultural. . Esto conduce también al enriquecimiento individual, porque el descubrimiento del otro ofrece la oportunidad de conocernos mejor a nosotros mismos, favoreciendo nuestro bienestar emocional.
Antes de promocionar el territorio, sin embargo, es necesario conocerlo, respetarlo, amarlo: en otras palabras, valorarlo. Solo así el turismo, factor clave, podrá crear verdaderos intercambios interculturales.